Para él
Cada paso que voy dando conforme a lo que DIOS dice,
me adentra más a su reino, mi vida Jesús bendice.
En aquella hora que quise pecar, del mar levanté:
razones de fe en victoria… por tu ruta andaré.
¿Quién dijo que no se puede bajar el cielo a la tierra,
vivir sin pecado alguno, ganarle al traidor la guerra?
¿Quién dijo que no se puede amar al cruel enemigo?
El perdón de Jesucristo siempre lo llevo conmigo.
Y es tan bella travesía la del camino correcto,
que te limpia el alma impura con el amor más perfecto.
Y es tan bello cada día amanecer conversando
con el causante de todo lo hermoso que estoy amando.
Gracias por el desayuno de verdad y palabra santa,
gracias por las melodías de felicidad que canta
mi garganta cuando alaba y te dice «padre ven,
toca con tu paz mi pecho, protégeme DIOS, amen».
QUE LINDO, CARLI, ME ENCANTO!
By: salamandra on marzo 18, 2011
at 9:24 am